Por Hèctor Torres
Aunque los locatarios del mercado Revolución, popularmente conocido como de San Juan, están prestos para ayudar en el reacondicionamiento del inmueble, incluso con recursos económicos, las autoridades municipales, encabezadas por Alfonso Martínez Alcázar, no los escuchan ni los atienden. ¿Y dónde está el gobierno ciudadano?
Demandan que las autoridades administrativas los escuchen pues están viviendo una situación muy crítica dentro del mercado por la ausencia de consumidores y es que ya no vienen porque, entre otras, los estacionamientos están ocupados por los mismos locatarios y eso provoca incomodidad para los clientes.
Consideran al mercado como una bomba de tiempo porque hay tanques de gas clandestinos y de eso han dado cuenta, mediante oficios, a Protección Civil Municipal y al propio presidente Alfonso Martínez Alcázar a quien le han pedido un espacio “para que nos escuche” y no ha habido respuesta.
Lo mismo sucede con el secretario de Servicios Públicos Municipales, José Luis Gil Vázquez, se comprometió, hace más de un mes, “a venir” y hasta la fecha no se ha presentado.
Piden la presencia de las autoridades municipales “para que oigan las necesidades del mercado, cuál es la situación que está atravesando, pero no se paran por aquí”.
Las instalaciones eléctricas, dijeron, ya tienen bastante tiempo, requieren una revisión y modificación “porque puede haber un corto y el mercado se puede hasta quemar”.
Hay muchas cosas con deficiencias, “y necesitamos que nos escuchen” para que las conozcan.
El drenaje está pésimo, los baños, administrados por el ayuntamiento, no han sido acondicionados desde hace más de un año “y nos dicen que va a haber rehabilitación tanto en el mercado Independencia como en el Revolución, pero cuándo, hasta que ocurra una tragedia”.
Afirman que lo que quieren, “es que nos escuchen las autoridades y ponernos a trabajar conjuntamente”.
Afirman que “no se trata de pelearnos, queremos que el presidente Alfonso Martínez; escucharlo y que nos escuche para sacar esto adelante, el mercado se está cayendo”.
Si no hay recursos, dijeron, pues “vamos a ver como locatarios cómo ayudar y cooperar, no es de pelearnos, es de buscar soluciones a este problema”.
Y es que da tristeza que el mercado se esté cayendo y que los mismos consumidores “nos estén perdiendo la confianza”.
Los baños antes estaban concesionados, pero los dejaron porque no se les daba mantenimiento y lo que se recaba por sanitarios, estacionamiento y plaza son alrededor de 120 mil pesos mensuales, “y no sabemos en qué se ocupan esos recursos, ellos dicen que para mantenimiento, pero no sabemos el paradero de ese recurso”.
Del estacionamiento, aclaró, es de cuando se cobraban cinco pesos, hoy cobran diez pesos y si te pasas 15 minutos te cobran la hora, “y antes no era así, era nada más una cooperación de la clientela, a las que se les daba media hora de tolerancia en lo que hacían sus compras”.
Tras señalar que el espacio destinado a Caseta de Policía está abandonado, honestamente reconocieron que el descuido en que se encuentra el mercado “parte es culpa de nosotros como locatarios, pero también de las autoridades que no nos han sabido corresponder”.
Reiteraron que es necesario que se pongan a platicar para darle mantenimiento al mercado, mutuamente “echarnos la mano, pero no nos escuchan, no se presentan. Debemos, autoridades y locatarios, buscar solución a este problema, pero platicando porque de otra forma no se puede resolver”.