Etelberto Cruz Loeza.
En virtud de que, en Morelia, se administran la ciudad con ocurrencias del aguacatero Alfonso y en el estado de Michoacán no existe ni plan ni proyecto ni nada que se parezca a un plan, proyecto, programa o idea, y hasta ocurrencia, para intentar recuperar la gobernabilidad, la autoridad en el total del estado y se toman decisiones inmediatas sin reflexionar, sin visión de Estado, y sí simplonas y a lo más fácil – la ley del Menor Esfuerzo -, como el asunto de la ex feria, pero ni hablar. Cartucheras al cañón y ¡Vámonos!
Pregunta sencilla: ¿territorialmente, ¿qué tanto territorio michoacano tiene el gobernador Ramírez Bedolla y las instituciones que representa?
Respuesta difícil.
Así las cosas, tratemos asuntos interesantes del gobierno federal.
Coincido con las ideas planteadas por Elisur Arteaga Nava, en su colaboración publicada en PROCESO. Número 2374, del 1° del presente. La tituló: De traición a traición.
Presentaré algunos fragmentos: AMLO durante los pocos o muchos años que le queden de vida, recordará el mes de abril de 2022, sobre todo los domingos. En todos le fue mal, salvo en el primero. El 10, la ciudadanía lo desairó, y de fea manera, su llamada “consulta”. El 17, una minoría de diputados tuvo la osadía de rechazar su reforma eléctrica, a la que no había que quitarle ni una coma. Todo eso no es nada comparado con lo que salió a la luz pública y se supo el domingo 24. Su “amigo “Donald Trump lo echó de cabeza, lo ventaneó de feo modo; en pocas palabras: lo encueró en público.
Trump, en Ohio, durante un mitin reveló que, por conducto del secretario de Relaciones exteriores, ordenó a nuestro presidente de la República desplegar 28 mil soldados mexicanos para impermeabilizar la frontera común e impedir el paso de indocumentados centroamericanos a territorio norteamericano. Agregó que AMLO es “uno” de los políticos socialistas con los que le gusta trabajar”. Nuestro AMLO, el nacionalista, el impoluto, el eterno rebelde, se sometió. “Nunca he visto a nadie doblase así”, comentó Trump (reforma, lunes 25 de abril. De 2022, primera plana) ¡Qué vergüenza!
Hasta el día de hoy, (26 de abril) no ha habido un solo desmentido, pues no es la habitual verborrea que afecta la boca presidencial. No sé si la habrá. A los mexicanos nos urge una explicación.
Me temo que AMLO, al acatar una orden del jefe de una potencia extranjera, violó la ley. No me atrevo a afirmarlo. Eso sólo lo puede determinar un juez o el Senado de la República en funciones de jurado de sentencia. El artículo 123 del Código Penal Federal dispone lo siguiente:
“Se impondrá la pena de prisión de cinco a cuarenta años y multa de hasta cincuenta mil pesos al mexicano que cometa traición a la patria en alguna de las formas siguientes:
“1°. -Realice actos contra la independencia, soberanía o integridad de la Nación Mexicana con la finalidad de someterla a persona, grupo o gobierno extranjero”.
Como soy abogado, sé que todo individuo tiene a su favor la presunción de inocencia. Este principio tiene validez universal y permanente, de él se beneficia incluso AMLO que en forma reiterada ha negado ese derecho a sus adversarios o a quienes se atreven a rechazar una reforma constitucional.
…La relacionada con México merece ser examinada con atención. Lo es por cuanto a que tuvo un reflejo en la política militar y migratoria de México.
Al parecer el gobierno de López Obrador, presidente de un país libre y soberano recibió y acató órdenes de Trump, por virtud de ellos movilizó elementos del Ejército, la marina y la Guardia Nacional para sellar la frontera con los estados Unidos e impedir el flujo de migrantes centroamericanos. Si ello es cierto, estamos en un hecho muy grave. AMLO no puede seguir siendo presidente de la República. En casos similares, AMLO ya estaría acusando de traición a la patria a los responsables y, además, exigiendo su renuncia y enjuiciamiento.
En materia tan delicada no conviene precipitarse ni actuar a la ligera; me limito a insinuar cuál es el momento político oportuno para presentar y ratificar una denuncia de hecho ante la Oficialía mayor de la Cámara de Diputados.
De conformidad con el artículo108 constitucional, el presidente durante el desempeño de su encargo, sólo puede ser acusado, entre otros delitos, por traición a la patria, que pudiera ser el caso. Es procedente la denuncia y el inicio del procedimiento acusatorio ante la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión. El partido de la oposición tiene a AMLO en sus manos, Lo que deben decidir es en qué momento tronarle el cuello. Tendrán que ponderar fríamente cuándo presentar la denuncia, hacerla pública y darle curso con fines meramente políticos.
…Ese AMLO que se auto designa “nacionalista” y defensor de la soberanía nacional, va a tener que inventar algo muy grande para superar la encuerada que le dieron y hacer que los mexicanos quieten la vista del lío en que se metió. Poor ejemplo: nacionalizar el aire, el sol, o, cuando menos, intentar meter a la cárcel a un expresidente de la República. No quisiera estar en su lugar.
Curiosamente, usando las palabras del constitucionalista Elisur Arteaga Nava, el presidente sabe que cometió gravísimo error, por lo que echó todo lo que tiene en el almacén de distractores y lo aventó a la arena pública – reforma educativa, la reforma a los libros de texto gratuito, la reforma constitucional en materia electoral, la reforma sobre el destino y funciones de la Guardia Nacional, la amenaza de expropiación a terrenos por donde pasará el Tren Maya, el aumento a las pensiones de adultos mayores y lo que se le ocurra – y es con lo que está distrayendo, divirtiendo y recreando a toda la opinión pública con el montón de iniciativas de reformas que lanzó en esta semana final de abril, que será recordada por él todo lo que le quede de vida.
En su poligonal, anacrónica y patológica, personalidad, se ignora, en realidad en cuál de ellas está presente y actúa: si como Robespierre-Danton en La Mañaneras, en la revolución francesa. Si como Napoleón Bonaparte, con sus propuestas de cambio y batallas políticas; si como Porfirio Díaz, con su iniciativa de Reforma Constitucional en Materia Electoral – sin meterme más allá de la lectura de las cabezas en los medios -, su iniciativa de reforma constitucional en materia electoral es una regresión a los tiempos político, sociales y electorales del Porfiriato, en el cual el Dictador Porfirio Díaz decidía quién formaría parte de las Cámaras de Diputados y de Senadores., previa revisión, análisis palomeo y autorización de los nombres en las listas propuestas por los gobernadores. Si como Luis XIV en materia de salud y seguridad.
Se desconoce.
Lo que sí se sabe es que el desea estar todos los días y de manera constante en los Medios de todo tipo y esto, le está saliendo caro, e igual que a Trump, el 6 de enero de 2021, a Andrés Manuel López Obrador, abril del 2022 será su Leipzig: fue derrotado.
Acaso se recuperará en su isla de Elba, pero le llegará su Waterloo y se irá Santa Elena, su rancho.