Ciudad de México, México, 16 de febrero de 2021.- Las evidencias científicas más recientes, sobre el origen de la actual pandemia de la letal enfermedad Covid-19 –provocada por el coronavirus SARS-CoV-2-, han determinado que “… es un resultado extremo de la explotación de la naturaleza por los humanos”, sostienen investigadores de la Sociedad Científica Mexicana de Ecología.
En la presentación del Ecoblog de la SCME, número V, año 2020, dedicado justamente a este problema de salud y que se titula, ¿Cuál será el impacto de la pandemia del COVID-19 en los ecosistemas?, los editores y destacados científicos mexicanos, Quetzalcóatl Orozco Ramírez, Martha Bonilla Moheno, y Arturo Flores Martínez, señalaron que en la Plataforma Intergubernamental Científico-Normativa sobre Diversidad Biológica y Servicios de los Ecosistemas (IPBES, https://ipbes.net/pandemics), se ha documentado ya que, además de las consecuencias a la salud humana, las pandemias y zoonosis emergentes en general, antes de la Covid-19, causaban más de un billón de dólares en daños económicos, anualmente. El Ecoblog puede consultarse en línea, en: https://scme.mx/ecoblog-mx/
Aceptaron que, lo mismo que la pérdida de biodiversidad, la aparición de enfermedades “… es consecuencia directa de actividades humanas disruptivas, como el cambio de uso del suelo, el comercio y consumo de animales silvestres, la sobreexplotación de recursos, y los sistemas de la producción no sostenible”, entre otros.
Para la Sociedad Científica Mexicana de Ecología la pérdida de biodiversidad y la explotación no sostenible de recursos naturales a escala global representa, indiscutiblemente, “… una de las principales amenazas para la salud y bienestar humano”.
Ahora mismo, además del alto costo en la salud y en la economía, el confinamiento y la repentina reducción de actividades humanas en casi todo el mundo -a causa de la pandemia del COVID-19-, ha generado cambios que seguramente impactarán en la biodiversidad en los próximos años.
Citaron que desde el comienzo de la cuarentena se viralizaron fotos de fauna silvestre en ciudades o en playas, debido a una pausa en el turismo masivo y global. Y entre otros aspectos positivos, también se registró una reducción de emisiones de carbono en muchos lugares, debido a la suspensión de actividades industriales, y al aislamiento (para muchos, reclusión) de las personas.
Para Orozco Ramírez, Bonilla Moheno, y Flores Martínez, las consecuencias asociadas a la pandemia, incluida la desaceleración económica, también repercutirán en la forma e intensidad del uso de recursos. Un ejemplo son los ecosistemas de las zonas que solían ser muy visitadas por turistas; o la forma en que está cambiando el uso de recursos locales, como leña y fauna silvestre para consumo humano en las comunidades rurales. Ahora lo que sigue, explican, es indagar la magnitud de estos cambios, y su impacto en los ecosistemas mismos.
Por ello, en este Ecoblog de la SCME, se presentan algunas de las primeras reflexiones en México, sobre el efecto de la pandemia del COVID-19 en los ecosistemas y la biodiversidad en nuestro país. Para este grupo colegiado, los problemas de la pandemia misma, y su impacto ecosistémico, tendrá más relevancia en los próximos meses o años, por lo que su análisis aportará información y experiencias valiosas hacia una mejor relación de la sociedad con el medio ambiente y los demás seres vivos.
El Ecoblog puede consultarse en el siguiente link: https://scme.mx/ecoblog-mx/
Los artículos de este quinto número son:
Resiliencia animal: ¿Por qué algunas especies de vida silvestre se asomaron a la ciudad con las cuarentenas?, de Miguel A. Gómez Martínez, Camilo E. Sánchez Sarria, Michelle García-Arroyo, Luis-Bernardo Vázquez, Ian MacGregor Fors.
La avifauna del confinamiento, de Rodrigo Pacheco (UNAM).
El uso de los recursos naturales en el Geoparque Mixteca Alta y la crisis por el COVID-19, de Quetzalcóatl Orozco Ramírez (UNAM).
Sociedad Científica Mexicana de Ecología
La Sociedad Científica Mexicana de Ecología, AC (SCME) se fundó el 2 de septiembre de 2005 en la Academia Mexicana de Ciencias, en la Ciudad de México.
El consejo directivo vigente lo preside la Dra. Ireri Suazo Ortuño, docente – investigadora del Instituto de Investigaciones sobre Recursos Naturales, de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo.
Actualmente la membresía de la SCME es de 2160 asociados, de casi 100 instituciones de todos los estados de México, y de otros países.
La SCME integra a los ecólogos mexicanos involucrados en actividades relacionadas con la generación de conocimiento en ecología. Además, promueve la investigación de la ciencia de la ecología en todas sus disciplinas; fortalece la comunicación entre los ecólogos y con el resto de la sociedad; y alienta la difusión del conocimiento científico. Una de sus principales tareas es fomentar una comunicación amplia y responsable con las autoridades estatales y federales mexicanas involucradas en los amplios temas del cuidado ambiental y la conservación de la biodiversidad de México.
Desde su creación, ha sido una institución con trabajo analítico y crítico, sobre los temas relevantes de la ecología, y la política ambiental mexicana. En el ámbito académico, es relevante la organización de reuniones científicas sobre temas relacionados con la ecología. Anualmente se realiza el Congreso Mexicano de Ecología, donde se discute ciencia de frontera en materia de ecología, generada en México y en el mundo.