DISTORSIONES.
Etelberto Cruz Loeza.
Utilizo palabras de Porfirio Muñozledo, expresadas en la ceremonia de presentación de su nuevo libro y que se publicaron en varios diarios nacionales. El Sol de México, en su edición del lunes 06 del presente, las colocó en su primera página: Por fuerza de la política, de la economía, de la sociedad y de las ambiciones, este régimen de concentración de poderes tenderá a desgajarse en los próximos meses, antes de que se cumplan 2 años.
Igualmente, tomo fragmento de palabras del ex secretario de Turismo Federal, Enrique De la Madrid Cordero, publicadas en La Razón, en su edición del 170519: En ese sentido, el presidente Andrés Manuel López Obrador tiene una buena intención. El problema es ya en la instrumentación; no se trata de si la casa tiene fisuras, llegar a tirarla; se trata de arreglarla y menos si la tiras y no tienes en dónde vivir. Entonces, en lo que tenemos diferencias algunos no es en el objetivo, que es un país, más justo, con menor corrupción, sobre todo mucho más seguro, en eso estamos todos de acuerdo. En lo que no estamos de acuerdo es en los modos, en las formas. Cuando para curar al paciente pones en riesgo su vida, no es el camino correcto.
El señor presidente de la República tiene muy buenas intenciones; alguna de ellas lo determinaron a proponer la entrega de ayudas económicas bimestrales, a muchos grupos poblacionales, entre ellos a adultos mayores de 65 años, a jóvenes que estudian – o no – y les llama Jóvenes Construyendo el Futuro y a quienes carecen de trabajo, se les ofrece una beca y, complementariamente, capacitación laboral.
Estas acciones ya están consideradas como derechos constitucionales de los segmentos poblacionales.
Muy recientemente sugirió, y así se aceptó, en la Comisión Nacional de Salarios Mínimos incremento del 22% a este instrumento de justicia laboral, derecho laboral y constitucional.
Todos le aplaudieron; lo mismo sucedió con el salario mínimo el año pasado: Se aumentó 15 %. De $ 123.22 subió a $ 141.70.
El señor presidente de la República está generando, al menos en nuestro país, una distorsión en nuestra economía: de acuerdo con la lógica económica, la riqueza se produce, se distribuye, circula el dinero, todos los factores de la producción reciben sus beneficios y, el Estado, a través de políticas fiscales – impone tarifas, costos y recibe su beneficio y, el Estado, mediante sus políticas públicas, hace llegar al pueblo, a la sociedad, a todos los grupos poblacionales, traducidos estos dineros en servicios e instituciones en suficiencia de cantidad y calidad para eliminar las desigualdades y se tenga-conserve el llamado Estado de Bienestar con mayor calidad de vida y mejor nivel de sobrevivencia, tratando de no desajustar los factores de producción, mas nuestro presidente está alterando ese proceso.
Lo está alterando: entregando a segmentos poblacionales dinero en efectivo y no en servicios con suficiencia de calidad y cantidad para todos. Trataré de ejemplificar: los ingresos totales del Estado=gobierno, es un pastel, una cobija, un cobertor: Debe alcanzar para todos en función de las prioridades sociales; si por la razón o razones que sean, le entrega más a un comensal=grupo social, está obligado a restar a otro, o a todos, partes para cubrir=compensar ese aumento de porción. El presupuesto=pastel=cobertor, no es elástico y auto generable y se deberá esperar otro ejercicio anual para volver a distribuir.
Analistas de instituciones financieras y economistas, nacionales e internacionales –
públicas y privadas – han realizado estudios sobre los efectos en la sociedad de estas políticas públicas y, coincidentemente, han arribado a estas conclusiones: 1° Ese efectivo en nada ha cambiado su condición económica-social. 2° Ese efectivo lo único que produce es dinamizar el mercado interior, alentar el consumismo. 3° Ese efectivo debió – y debería – traducirse en servicios públicos de mayor y mejor cantidad y calidad de infraestructura urbana-rural, agropecuaria, minera, transporte, salud, educación – todos los niveles y subsistemas -, etc., etc. ésta es la explicación de la razón por la cual existe desabasto de todo y se manifiesta una atonía en obra pública. Esos miles de millones de pesos que ha entregado a nosotros los ancianos y jóvenes – aun ninis – hacen muchísima falta en toda la administración Federal: Educación, salud – en todas las instituciones de este sector público -, obra y transportes públicos, en explotación petrolera, en equipamiento de policías y corporaciones del Ejército-Marina-GN – nacionales -, aduanas, programas a desarrollar por el IMSS-ISSSTE, etc., etc. 4° Se entregaría al final del proceso económico, no antes, en el inicio de sus fases. 5° Esta política pública de falso estímulo económico y social generará distorsiones en nuestra economía. 6° Estas distorsiones, perjudicarán, inicial y finalmente, al pobre, empobrecerá aun más a la Clase Media y generará mayores desigualdades.; simplemente, cuánto ¿cuesta al usuario del IMSS, ISSSTE-SSA-INSABI- ¡Quién sabe qué será esto y dónde está! ¡Ah!, pero si cobra y gasta presupuesto. ¿En qué? ¡Solo, y solo, ellos saben?
Por lo pronto, a esperar las distorsiones, porque en Economía, aparte los Efectos Mariposa estas distorsiones serán directas; algunos signos y augurios de estas distorsiones son la diaria devaluación, endeudamiento público, inflación=costo de la vida, el tipo de cambio, la continua huida de capitales o su opuesto, la no inversión extranjera directa, más la constante-diaria salida de dólares. Es significativo que seamos uno de los países más desiguales del mundo.
Lo prioritario no es el aumento del salario mínimo, sino lo que se puede comprar con él y fíjese lo que son las cosas: el nuevo salario mínimo, que entrará en vigencia a partir del 1° de enero de 2022, ya fue rebasado con los actuales costos de la vida diaria=Canasta Básica: a 16 días de su inicio de vigencia.
Así que, prepárese lo mejor, pero espere lo peor.