Por: Miguel Estrada García
La infancia y la juventud de Roberto y René, fue un ombligo conectado al boxeo y obviamente por estar siempre boxísticamente en contacto con Ricardo, y esto daba una severa contrariedad a la disposición de Don Ricardo quien se empeñaba en que todos practicaran el beis bol; en una ocasión les compro todo el equipo, que de nada sirvió, porque ellos siguieron practicando el deporte de su pasión el boxeo.
Sin embargo esa pasión no contemplaba con que Roberto pensara en dedicarse al boxeo profesional, más bien su proyecto de vida era el estudio pues quería ser un ingeniero industrial, esta idea se disipa precisamente estando estudiando en Morelia, un compañero de clases le comento que su papa estaba haciendo box en Patzcuaro, lo invita a pelear con un sueldo de nada menos de 1500 pesos.
Este era un sueldo muy atractivo, así que Roberto no lo pensó dos veces y acepto la oferta, siendo así su primera pelea, y esta le cambiaria su proyecto de vida, pues en esos días que estudiaba tecnológico de Morelia, un segundo toque de llamada al box se origina cuando platico con algunos amigos egresados de ahí, ellos le comentan que estaban trabajando en el Puerto Lázaro Cárdenas y que su sueldo era de 1000 pesos, ante este panorama económico sufre su primera desilusión del estudio y de la da más solides al cambio de planes del proyecto de vida.
Asi que de inmediato valora la situación, si valía la pena seguir estudiando, sin embargo termina el bachillerato y entre a la carrera de ingeniera eléctrica pero a la vez seguía peleando, y un día pudo más el boxeo y decidió irse a México.
Las veces que peleaba en Patzcuaro represento la punta de su carrera boxística, púes seguía peleando en la arena del papa de su amigo y en ocasiones también peleaba allí su hermano René que por cierto, el si todo el tiempo pensaba en ser boxeador profesional, él cuando estaba en la secundaria ya peleaba y hasta tenía sus boxeadores o sea que era también entrenador, y así se reunían ya con un solo fin, el de ser boxeadores profesionales.
Muy ligados Roberto y René estuvieron un buen tiempo en el sector amateur, fue en el año del 78-79, cuando tienen más actividad al participar varios torneos, pero el más importante llegaría a ellos con “Los Guantes de Oro” en la arena Coliseo, René llego a cuartos de final Y Roberto gana el campeonato de peso pluma en la categoría de novatos.
Más tarde debutarían profesionalmente los dos juntos en Veracruz, y así seguirían peleando a veces juntos o en diferentes funciones, en varias ocasiones en Acapulco, y en la coliseo de México peleamos siempre con lo mejor, pero la sombra de su hermano Ricardo influía, para algunos boxeadores no quisieran nada con ellos querían pelear o tenían que pelear con muchachos que llevaban mas peleas que ellos esto en una ocasión llego a que suspendieran al entrenador el Ernesto Gallardo, pues Roberto peleo en Acapulco con Balam Torres que ya era peleador de 10 rounds, cuando él era preliminarista, por cierto fue su primer empate muy importante porque iba invicto en diez peleas.
La Arena Coliseo fue un talismán de buena suerte para Roberto, en ese lugar nunca perdió, llego luego a pelear a 8 raunds y esto ya significaba demasiado, con este curricular logra enfrentarse con Román Núñez, fue un sábado, el promotor les había dicho que el que ganara le iban a dar una pelea estelar de miércoles y Roberto lo noqueo en el raund 6, fue una pelea muy fuerte, a Ricardo no le gusto pues se golpearon muy duro.
Vinieron las primeras dos derrotas, una que le dolió mucho, fue precisamente en su tierra, en Apatzingán, fue con el Chango Macías un boxeador de Guadalajara, que ya llevaba varias peleas a 10 raunds y para Roberto era la primera a 10.
Un día se pregunto, que primero tuvo que ver peleado varias veces a 10 raunds en México y luego salir a provincia ya con más experiencia.
Su segunda derrota fue con Miguel Ángel Jiménez, también era un boxeador con más experiencia pues ya había estado clasificado dos veces a nivel nacional; esta vez ocasiono que platicara con el señor gallardo, quien argumento que lo habían engañado con el nombre del rival, pero estas dos peleas le sirvieron bastante pues cuando llegó a Japón le hicieron lo mismo, pero respondió más seguridad de poder pelear 10 raunds.
La excelente participación con hermano René en los torneos de los Guantes de Oro, fue la vía para que un promotor Japonés que leyó en un periódico en su país la noticia de la buena trayectoria de Roberto y René, se intereso en ellos y vino para que se fueran a hacer campaña allá en Japón, pero al señor Gallardo no le no aprobó la oferta porque según él, todavía no era el momento.
El promotor era nada menos que Takashi Chiba y era la persona que había organizado la pelea de Ricardo por el campeonato mundial en Sendai, tenia pues puesta la mira en ellos y después volvió en el 82,una nueva platica cierra un contrato con Roberto y la Lobita Ramírez, en ese tiempo clasificado mundialmente, se van a Japón, con esto los Arredondo rompen con la unión de varios años, tomando rumbos diferentes, manteniendo a distancia esa unión con la firme idea de superación; René se fue para los Ángeles con Ricardo y Roberto a Tokio.
Llegar a Japón es como llegar a otro mundo, los carros circulan por la izquierda, traen el volante en el lado derecho, en los autobuses de pasajeros subes por atrás y pagas ya cuando bajan y si esto era diferente para Roberto, todo lo relacionado con el boxeo también lo era.